Es cierto, si es cierto.
Todo lo que dicen es cierto, y por el contrario, por el otro lado... no, no es cierto. Nada de lo que dicen es verdad, todos ellos son unos mitómanos.
¿Qué? ¿Todos? Imposible...
Si... todos ellos, todos y cada uno de ellos, no se salva nadie.
¿Y entonces qué nos queda?
¿Qué que nos queda?
Y entonces se echo a reír sobre el árbol, lo ataco una incontrolable risa, hasta que murió de un ataque al corazón.
Entonces: Silencio.
Nadie más volvió a reír, no nadie más volvió a hacerlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario